La palabra codeína viene del francés, codéine, vocablo procedente del griego kōdeia = κώδεια, 'cabezuela o cápsula (fruto) de la adormidera; según algunos lingüistas, probablemente derivado de κώος = kōos (cavidad, madriguera), aunque no todas las fuentes coinciden en esto. Kōdeia se refería casi seguro a una especie de amapola, del género Papaver'. Más el sufijo ajetival -ina, del latín -īnus, -īna, a su vez del griego -inos , muy utilizado para dar nombre a infinidad de sustancias como: anilina, teobromina, cafeína, ampicilina, tobramicina, eosina, valina, estricnina, morfina, antocianina, luteína, etc. Literalmente, "sustancia derivada de la cápsula de la adormidera (κώδεια)".
El término fue propuesto en 1832 por el químico francés Pierre-Jean Robiquet (1780-1840), quien aisló la codeína del opio, aunque actualmente se obtiene por un proceso de metilación de la morfina (otro alcaloide derivado de la adormidera), por eso, codeína y metilmorfina, se consideran como palabras sinónimas. El trabajo de Robiquet, abrió una nueva era en la producción de sustancias antitusígenas (contra la tos), antidiarreicas y analgésicas, pues estas son las principales propiedades de la codeína; apareció publicado en ese año en el artículo Nouvelles observations sur les principaux produits de l'opium, en Annales de chimie et physique 225-267, "Nuevas observaciones sobre los principales productos del opio, en Anales de química y física, pág. 225-267".
El vocablo griego kōdeia, parece tener relación de origen con la antigua raíz indoeuropea *keuə- (hinchar, bóveda, agujero), que Pokorny escribe como k̑eu‑., raíz a la que se han vinculado palabras como celacanto, cúmulo, acumular, celoma, cavidad, cima, colmo, etc.
La adormidera, de donde se extrae el opio, la morfina, la papaverina, la codeína y otros alcaloides, fue denominada por Carlos Linneo como Papaver somniferum, ya que esta planta (o su fruto), y en general, cualquier tipo o especie de amapola, de la familia Papaveraceae, porque en latín llamaban papāver a la amapola o adormidera; y somniferum, porque induce o provoca sueño.
El uso de la adormidera para fines medicinales, se remonta hasta el tercer milenio a.C., donde aparece en las tablillas sumerias; asimismo, en los documentos babilonios más antiguos, se observan representaciones de cápsulas de adormidera. En fin, numerosos escritores de la antigϋedad, mencionan esta planta en sus obras: Homero, Hesíodo, Hipócrates, Plinio el Viejo, Gayo Valerio Cátulo, Publio Virgilio Marón, Teofrasto, entre muchos otros.
- Gracias: Jesús Gerardo Treviño Rdgz.
- Gracias: Joaqu1n
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