La palabra toxoplasmosis es un neologismo médico del siglo XX, creado en francés (toxoplasmose) en 1909, y se documenta en inglés (toxoplasmosis) desde 1934, constituido por los siguientes componentes griegos: τοξόν = toxón (arco), la vocal de unión -o-, así como πλάσμα = plás-m(a) (con el significado científico actual de "líquido componente o constituyente", aunque su significado original fue en realidad "moldear, dar forma"), y el sufijo -osis (en este caso con el significado de proceso patológico, como en piroplasmosis). La acuñación del término en francés (toxoplasmose) es autoría de los microbiólogos galos Louis Herbert Manceaux (1865-1943) y Charles Jules Henri Nicolle (1866-1936), quienes aislaron al parásito en 1908, de las células mononucleares del hígado y el bazo de un roedor salvaje oriundo del norte de África, que en lenguaje bereber lo llaman 'gundi', cuyo nombre científico es Ctenodactylus gundi (el nombre latinizado del género procede del griego ktenos, genitivo de kteis, que significa algo así como 'peine o rastrillo' y dactylus, 'dedo', debido a que este animal posee en los dedos interiores una especie de peine córneo que usa para acicalarse la piel). Con respecto al nombre del parásito (Toxoplasma gondii), el motivo de la acuñación es el siguiente: Toxoplasma, debido a que estos protozoarios, observados a través del microscopio, sus esporozoítos muestran una forma semejante a un arco (toxón) o luna en fase creciente, y se diseminan en el hospedero por medio del plasma sanguíneo y la linfa. Y el nombre la especie gondii, por 'gundi' como se le llama en la lengua bereber al roedor de donde fue aislado por vez primera el protozoario.
Toxón (τοξόν) se relaciona con la raíz indoeuropea *tekʷ (correr, huir, fluir, Pokorny p. 1059-60, teku̯). De toxón se han generado palabras como taxácea, tejo, tóxico, toxicología, intoxicación, toxoide, etc.
Toxon (arco, en griego antiguo) y toxikon (lo referente al arco, término empleado ya por Aristóteles desde el s. IV a.C., para nombrar al veneno utilizado por los que disparan flechas, pasó al latín como toxicum, de donde se derivan palabras como: tóxico, toxicología, intoxicación, toxina, etc.). Así que Manceaux y Nicolle, al ver la forma de los esporozoítos, decidieron acuñar en francés las palabras toxoplasme, para nombrar al parásito y toxoplasmose para denominar a la enfermedad.
Toxoplasmosis es una enfermedad ocasionada por el protozoario parásito intracelular obligado, Toxoplasma gondii, la cual se encuentra ampliamente distribuida por todo el mundo. Afecta a gran cantidad de especies de mamíferos terrestres y acuáticos, así como a muchas aves. Sus huéspedes definitivos son los félidos domésticos (gato casero) y silvestres. Se calcula que entre el 20 y 50 % de la población humana a nivel mundial es seropositiva, es decir, están o estamos infectados por este parásito, que puede sobrevivir por toda la vida del hospedero, sin causar daños o síntomas, siempre y cuando el sistema inmunológico de la persona se mantenga activo, pero es capaz de ocasionar síntomas de intensidad variable en sujetos inmunodeprimidos, mujeres gestantes, fetos, neonatos o en niños.
Fuentes consultadas:
- Gracias: Jesús Gerardo Treviño Rodríguez.
Avísanos si tienes más datos o si encuentras
algún error.
Miembros Autorizados solamente:
Los iconos de la parte superior e inferior de la página te llevarán a otras secciones útiles e interesantes. Puedes encontrar la etimología de una palabra usando el motor de búsqueda en la parte superior a mano derecha de la pantalla. Escribe el término que buscas en la casilla que dice “Busca aquí” y luego presiona la tecla "Entrar", "↲" o "⚲" dependiendo de tu teclado. El motor de búsqueda de Google abajo es para buscar contenido dentro de las páginas.
↑↑↑ Grupos Anteriores
↓↓↓ Grupos Siguientes