La palabra estación viene del latín statio, el participio del verbo stare (estar parado), que nos dio las palabras estar, asistir, instalar, etc. La palabra latina stare viene de una raíz indoeuropea *sta-, que también dio στατός (statos = estar parado en equilibrio) en griego, ver: estática.
La inclinación del eje terrestre respecto a la Eclíptica es lo que da origen a las estaciones del año. La órbita de La Tierra en torno al Sol no es exactamente circular, de ello se deriva que algunas estaciones estén más pronunciadas en el hemisferio norte y en el hemisferio sur. Cuando La Tierra se halla más lejana al Sol se dice que está en su apogeo, es decir más lejos del centro gravitacional del Sol; se dice que está en perigeo cuando está más cerca del Sol.
Dada la inclinación de dicho eje, el Sol parece desplazarse entre ambos polos, alcanzando su punto máximo en los paralelos llamados trópicos, a los 23°27' de latitud: en el Norte es el Trópico de Cáncer y en el Sur el Trópico de Capricornio. El solsticio de invierno, cuando el Sol parece más débil y los días más cortos, se da alrededor del 22 de diciembre en el hemisferio norte y alrededor del 22 de junio en el hemisferio sur; se da cuando el Sol toca la máxima latitud aparente respectiva e inicia su "camino" de vuelta hacia el otro polo. El solsticio de verano, cuando el Sol parece más fuerte y los días más largos, tiene las mismas fechas, pero opuestas a las del invierno en cada hemisferio. Los equinoccios son la primavera y el otoño, cuando los días y las noches parecen tener una duración igual, cuando el Sol pasa justo sobre el Ecuador; se dan alrededor del 21 de marzo y alrededor del 23 de septiembre.
APOGEO tiene su origen en el griego "apogeiós", PERIGEO viene del griego "perigeiós".
PRIMAVERA, del latín "primum,prima", primera y "ver", camino o círculo.
VERANO, del latín "veranus", ciclo anual; un sinónimo es ESTÍO, del latín "aestivum", caluroso.
OTOÑO, del latín "autumnus", la caída (de las hojas de los árboles).
INVIERNO, del latín "hibernus", adormecimiento.
SOLSTICIO, del latín "solstitium", momento en que el Sol emprende el retorno al polo opuesto.
EQUINOCCIO, del latín "equinoctium", momento en que el Sol pasa por el Ecuador en sun camino hacia cada uno de los polos.
ÓRBITA, del latín, "orbîtum", cualidad de redondo.
- Gracias: Maximiliano Mena Pérez
La palabra latina statio, stationis, en principio acción de detenerse y estar plantado en pie, designa en latín a todo punto de permanencia, hábitat o residencia, también en el ejército a los puestos de guardia para centinelas, a lugares de parada en las vías o carreteras, en que hay postas, posadas, etc. Desde el punto de vista astronómico designa a la aparente detención del movimiento de un astro, de ahí que su derivado stationalis (estacional), califique a los astros fijos. En principio se aplicó en el año a los solsticios, puntos del año en que el sol "se detiene" para invertir su movimiento, luego también a los equinoccios y por fin a los cuatro periodos estacionales del año.
Hay que hacer una serie de apreciaciones:
La palabra latina ver, veris nunca significó camino o círculo, sino simplemente primavera. Algunos especularon con un valor inicial de temporada, pero en latín siempre significó primavera.
El nombre verano viene del adjetivo veranum que significa sencillamente "primaveral" y se empleaba en latín tardío en la expresión tempus veranum sobre todo para referirse al final de la primavera. En el romance castellano desplazó al propio nombre del verano, aestas, aestatis, o a su derivado aestivum, que son las formas que han quedado mayoritariamente en otras lenguas romances.
El adjetivo latino hibernus del que viene nuestra forma invierno jamás significó adormecimiento, sino simplemente "invernal". Es un derivado de la palabra latina para invierno, que es hiems, hiemis, y que se vincula a una raíz indoeuropea *ghei- (invierno). Otra cosa es que llamemos a veces hibernación al letargo o adormecimiento que sufren por ejemplo algunos animales, por el hecho de que lo sufren en invierno.
La palabra latina autumnus designa sin más al otoño y nunca significó "caída de las hojas". Los antiguos romanos lo relacionaban con augere (aumentar, incrementar) porque era la época en que los almacenes rústicos acababan de llenarse con las últimas cosechas. Pero es una etimología popular. La palabra en realidad es de origen etrusco y no está claro el significado de su raíz.
Solsticio viene del latín solstitium, que literalmente significa "parada o detención del sol", compuesta de sol, solis y de la raíz del verbo stare (plantarse, pararse), pues se refiere al día en que el sol detiene su avance aparente, tanto en su punto de salida y puesta como en su cénit, para iniciar un movimiento aparente inverso.
Equinoccio viene del latín aequinoctium, compuesto de aequus (igual) y nox, noctis (noche), y se refiere a los dos días concretos del año (equinoccio de primavera y equinoccio de otoño), en que la duración de la noche es exactamente igual que la duración del día (entendiendo día como tiempo de luz).
Órbita no viene de orbitum, ni orbitum significa cualidad de redondo. Órbita viene del latín orbita, que significa en latín dos cosas principalmente: o bien la huella que deja una rueda, o la trayectoria de un movimiento circular, en concreto, el curso o revolución de un astro, que es el sentido que le damos. Es un derivado de orbis (círculo, y luego también cualquier cosa circular o incluso una esfera).
- Gracias: Helena
Avísanos si tienes más datos o si encuentras
algún error.
Los iconos de la parte superior e inferior de la página te llevarán a otras secciones útiles e interesantes. Puedes encontrar la etimología de una palabra usando el motor de búsqueda en la parte superior a mano derecha de la pantalla. Escribe el término que buscas en la casilla que dice “Busca aquí” y luego presiona la tecla "Entrar", "↲" o "⚲" dependiendo de tu teclado. El motor de búsqueda de Google abajo es para buscar contenido dentro de las páginas.