Etimología de ORINA

ORINA

La orina es la secreción líquida de los riñones, o lo que conocemos comúnmente como "meados" o "pichí". La palabra orina nos viene del griego οὖρoν (ouron = meado), de ahí también los términos:

La palabra griega οὖρoν se vincula con la raíz proto-indoeuropea *awer- (mojado).


El sustantivo castellano "orina" se recibió a través del latín urīna, al igual que el verbo orinar proviene del verbo latino urināre.

Orina tiene dos formas de plural: orinas ("en el estante están las muestras de sus orinas") y orines ("la farola está oxidada por los orines de los perros").

Como sinónimo de orina en el DRAE también aparece "micción" (del lat. mictĭo, -ōnis), acción y efecto del verbo "miccionar" (un cultismo) equivalente al vulgar mear, por lo que "micción" significa lo mismo que lo antes dicho: "meado". Y son sinónimos porque la orina es el producto normalmente resultante "de la micción" / "del meado", y es precisamente por ello. Siendo muy sutiles y dado que es posible que se excrete otra sustancia (es así que cabe miccionar sangre o ver cómo el Manneken Pis mea vino o cerveza) podríamos distinguir la "orina" (la sustancia líquida en sí misma) del "meado" (lo resultante de la micción). Por ello traduciría "οὖρoν" [ouron] antes como "orina" que como "meado".

A título anecdótico, les comento que en España de la persona excesivamente atildada se dice "que mea colonia" o "que mea Chanel", que hace referencia, claro está, a los perfumes de la casa fundada por Mademoiselle "Coco" (pronúnciese a la francesa: Cocó"): Gabrielle Bonheur Chanel.

Por último, de la raíz proto-indoeuropea antes dicha derivó la indoeuropea auar- o aur- (con un sentido de "fluir, discurrir un líquido") que es origen de los términos griegos y latinos mencionados, e igual ocurrió con el sánscrito (uar-) y el celta (ur-) como agua/lluvia (y del celta, ur pasó al euskera, lo cual es algo excepcional).

Así pues, en el inconsciente colectivo subyace una estrecha relación entre "orina" y "lluvia" (y no solo por la imagen mental "líquido que cae") que viene de muy lejos: para las antiguas cosmogonías la lluvia no era sino orines divinos (que los griegos tenían tal creencia lo plasmó Aristófanes en su obra "Las nubes"). Pero de ningún modo el color dorado debe hacernos pensar que orina y oro comparten origen, al menos en cuanto a su raíz etimológica ya que oro proviene de aurum.

- Gracias: TKC


La palabra orina viene del latín urina y en ningún caso del griego. Es absolutamente falso además que el término latino urina sea un préstamo del griego οὖρον. El vocablo urina que primitivamente en latín designaba a cualquier líquido, como lo testimonia el verbo urinari (en origen, sumergirse en el agua), adquiere tanto el sentido de orina como de líquido seminal de resultas de una especialización técnica en la que quizá pudo influir la semántica del griego οὖρον, pero nada más. Urina es un término antiguo latino, y plenamente latino, que no depende de ningún préstamo, y que a lo sumo puede compartir un remoto origen común indoeuropeo, aunque ni siquiera eso está claro.

- Gracias: Helena


La palabra urina, con el significado de orina es una herencia del griego οὖρoν (ouron = meado), como explico arriba en la primera entrada.

La palabra orina es un cultismo usado para referirse al líquido amarillo que se produce en los riñones, lo que vulgarmente conocemos como "meado" o "pichi". Heredamos ambos vulgarismos del latín, pues en latín se referían a este líquido usando derivados de los verbos meio y *pisso,  y no urina. La palabra urina, que se refiere Helena arriba, es otra, pues como ella misma admite tenía un significado distinto. Se refería más bien al agua y el verbo urinari significaba sumergirse en agua.

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