Etimología de RESENTIDO

RESENTIDO

La palabra resentido (dolido y disgustado por una persona) está compuesta con los siguientes elementos latinos:


La palabra resentido, en realidad un participio del verbo resentir o resentirse, aparte de aplicarse al que tiene secuelas de algún padecimiento, se refiere a la persona que guarda un fuerte sentimiento de pesar o enojo por algo, a veces un enojo vengativo, que llamamos también resentimiento.

Estas formas han sido creadas por la lengua romance con un prefijo latino re- (movimiento hacia atrás o de rechazo, intensificación) y el verbo sentir, procedente del latín sentīre, que significó en latín experimentar una sensación que te llega por los sentidos y a la vez experimentar el sentimiento, reflexión o acto de decisión que esta percepción conlleva o provoca. Puede decirse que su valor más primitivo es tomar una dirección por haberse orientado por los sentidos, significado que aún conservamos cuando hablamos del sentido de un movimento o de las agujas del reloj. Designa pues un completo acto perceptivo-reflexivo concebido como una acción inseparable. Así el sensus (de donde viene seso) es en latín no sólo el sentido y la sensación, sino sobre todo el llamado "sentido común", la facultad de pensar bien con arreglo a la percepción de unas situaciones prácticas. La sententia (sentencia) es la opinión, postura mental y decisión extraída de la percepción de unos hechos. Asentir (de assentīre) es mostrar conformidad de juicio con otros. Consentir es estar de acuerdo con otros, confluir en una postura o percepción, disentir es apartarse de la percepción, pensamiento y decisión de otro, etc.

El resentimiento agudo es un sentimiento tan destructivo como autodestructivo que en muchos casos llega a niveles patológicos como resultado de la existencia de un agudo sentimiento de fracaso e inferioridad que se enmascaran mediante él. Una de sus manifestaciones frecuentes se da en adolescentes afectados de una grave rebeldía destructiva hacia todo lo establecido, sea enseñanzas o personas, que puede llegar a conductas violentas o delictivas que son consecuencia de un afán de reafirmar su personalidad afectada en una etapa crítica por un fuerte fracaso afectivo, familiar y escolar, de ahí la importancia de prevenir estos. En otros casos, y en edades adultas y aun avanzadas, vemos asimismo igualmente un estado patológico resultante de un enfermizo resentimiento en individuos que no han aceptado su propia trayectoria vital y buscan reconocimiento personal refugiándose en ideas exculpatorias, introduciéndose en todas partes para descalificar o intentar inútilmente destruir a toda costa los logros de las ciencias o el estatus de los demás, que llaman "establecido" con ideas o teorías incluso que dicen poseer en exclusiva, y tratando por doquier de destruir aquello que dicen despreciar profundamente, en un autoocultamiento de su propia enfermiza y a veces no justificada frustración o sensación de humillación. Es un resentimiento vital que a veces les hace refugiarse en ideologías autoexculpatorias y que busca la autoexaltación, dibujando para sí mismos un papel de eternas víctimas del mundo entero y eternos héroes sin reconocimiento.

- Gracias: Helena

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