El adjetivo rancio viene del latín rancidus (rancio, pútrido, y en sentido figurado desagradable e insoportable), que vemos empleado por Lucrecio, por Horacio, Plinio o Juvenal. Como es habitual, en la evolución patrimonial se debilitó y perdió la d intervocálica.
El adjetivo se forma con un característico sufijo -idus a partir del verbo rancere (estar rancio, enranciar). Del adjetivo rancidus se forma un verbo denominativo rancidare (estropearse, volverse rancio o desagradable), a partir del que se forma nuestro verbo enranciar. También con un sufijo -or de efecto o resultado se forma rancor (enranciamiento), que en el s. IV d. C. adquiere un uso moral, de cierta "podredumbre" moral por odio, y da lugar a nuestro vocablo rencor.
- Gracias: Helena
Avísanos si tienes más datos o si encuentras
algún error.
Miembros Autorizados solamente:
Los iconos de la parte superior e inferior de la página te llevarán a otras secciones útiles e interesantes. Puedes encontrar la etimología de una palabra usando el motor de búsqueda en la parte superior a mano derecha de la pantalla. Escribe el término que buscas en la casilla que dice “Busca aquí” y luego presiona la tecla "Entrar", "↲" o "⚲" dependiendo de tu teclado. El motor de búsqueda de Google abajo es para buscar contenido dentro de las páginas.
↑↑↑ Grupos Anteriores
↓↓↓ Grupos Siguientes