La palabra obsolescencia que designa la cualidad de estar volviéndose obsoleto o caer en desuso, viene del latín, del participio de presente obsolescens, obsolescentis (que se vuelve desusado, que pasa de moda), que es participio del verbo obsolescere, cuyo participio de perfecto, obsoletus, nos da la palabra obsoleto.
La etimología del verbo obsolescere es discutida. Lo que está claro es que se compone del prefijo ob-/obs- (enfrentamiento, contra, idea de obstáculo, a causa de) y del sufijo de procesos -sc-/ -esc-. Pero no está claro si el radical es el del verbo solere (acostumbrar, soler), en cuyo caso tendría relación con palabras como soler o insólito, o bien es del verbo alere (nutrir, hacer crecer, hacer desarrollarse) con una apofonía, y en este caso se relacionaría con palabras como adolescente, adulto, alimento o índole.
En caso de tener relación con solere, obsolescere significaría en origen estar en proceso de encontrar un obstáculo al uso y la costumbre de algo. En caso de tener relación con alere, sería estar en proceso de encontrar un obstáculo a su desarrollo.
- Gracias: Helena
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